Luis, que te puedo decir .
Nada, nunca te vamos a olvidar, es más, tú pasión y tú entrega fue única. Gracias a Dios por dejarme vivir y verte vestir la celeste del alma.
Gracias.
Luis, que te puedo decir .
Nada, nunca te vamos a olvidar, es más, tú pasión y tú entrega fue única. Gracias a Dios por dejarme vivir y verte vestir la celeste del alma.
Gracias.