Inundaciones en Brasil: las zonas afectadas en imágenes y mapas

Esta nota fue publicada inicialmente el martes 7 de mayo de 2024 y actualizada el miércoles 8 de mayo de 2024.

Barrios enteros permanecen todavía bajo agua en Rio Grande do Sul luego de las inundaciones de estos días que causaron la muerte de 96 personas y obligaron a miles a dejar sus casas en bote o nadando. Otros debieron ser rescatados en helicóptero. Hay también 131 desaparecidos.

El fenómeno meteorológico, que dejó volúmenes de lluvia históricos y ha convertido las calles en ríos, es atribuido por expertos y el gobierno brasileño al cambio climático. Los expertos afirman que llovió en 10 días lo que llueve en tres meses.
Las primeras cifras del gobierno de Lula da Silva hablan de 46 mil personas rescatadas y 150 mil desplazados de sus hogares. Son las peores inundaciones en la historia del estado.

Los trabajos de rescate continúan con la participación de 42 aeronaves, 243 botes y 15.000 militares, que se suman a los equipos de las autoridades regionales y locales. El estado de Rio Grande do Sul emitió un decreto para amparar los municipios afectados por la crecida de ríos.

El desborde del Río Yacuí en el último mes

Corra la barra para ver cómo cambió el caudal entre abril y mayo. Las imágenes fueron tomadas del satélite Sentinel del programa Copernicus, de la Unión Europea
El río Guaíba, en medio de la ciudad y su zona metropolitana, marcaba el lunes 5,26 metros, encima del récord de 4,76 metros registrado durante unas históricas inundaciones en 1941, tras alcanzar un pico de 5,30 este último fin de semana.

La tragedia golpeó unas 385 ciudades y poblados de Rio Grande do Sul, una extensa región agropecuaria con una población de 11 millones. Las autoridades creen que la situación crítica se mantendrá durante varios días porque todavía queda mucha agua por evacuar. Además, aumenta la preocupación por el abastecimiento de agua y alimentos.

Río Yacuí al oeste de Porto Alegre

San Leopoldo

Porto Alegre

Montenegro

El agua anega todavía este miércoles Porto Alegre y centenares de otras ciudades en el sur de Brasil. Muchas siguen aisladas, sin comunicaciones ni servicios básicos.

También están interrumpidos los pasos de 200 carreteras y autopistas después de que las aguas arrastraran puentes y carreteras. Militares, bomberos y voluntarios siguen trabajando contrarreloj en las tareas de rescate con helicópteros, lanchas o botes.

A su vez, más de dos tercios de Porto Alegre está sin suministro de agua corriente, por lo que decretó el racionamiento de agua, que autoriza su uso solo para consumo esencial. Por su parte, el Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) alertó por nuevas tempestades de "gran peligro" en áreas del sur del estado, con lluvias de hasta más de 100 mm, vientos y posiblemente granizo hasta el mediodía de este martes. Pero en las zonas más afectadas, la lluvia podría volver a partir de hoy.
La policía gaúcha comenzó a registrar robos e incluso robos a mano armada en barrios inundados de la capital y en las ciudades vecinas de Canoas, São Leopoldo y Sapucaia do Sul. Dos hombres fueron detenidos este lunes tras atacar un barco de rescate que navegaba en el barrio de Mathias Velho, en Canoas, lleno de personas sin hogar. Pero en el interior había dos policías, que detuvieron a los delincuentes.

También en Mathias Velho, dos hombres casi fueron linchados por ciudadanos cuando los sorprendieron entrando en una casa por la noche para robar electrodomésticos. “Los ladrones también aprovechan el momento en que la gente sale de casa con objetos valiosos, como dinero”, informó el inspector Charles da Silva Pacheco, de 37 años.

Según los informes, los ladrones utilizan motos de agua. Por miedo, los voluntarios que trabajaban en el rescate de personas en Canoas y São Leopoldo comenzaron a conducir embarcaciones armadas con escopetas. Cuando se acerca una embarcación sospechosa, los voluntarios demuestran que están armados. “Quiero ver quién nos va a robar”, dijo un barquero en un video que circula en las redes sociales.

Para contener la ola de robos, el comandante general de la Brigada Militar de Rio Grande do Sul, coronel Cláudio Feoli, dijo que decenas de policías vieron canceladas sus vacaciones y regresaron a trabajar durante el fin de semana. Según él, también se reforzó la vigilancia policial en Canoas y São Leopoldo para evitar saqueos. “Pero nuestro enfoque es salvar vidas, ya que estamos trabajando en un escenario de guerra”, reflexionó el coronel.

Producción: Faustina Bartaburu, Nicolás Pereyra, Florencia Traibel.
Visualizaciones: Faustina Bartaburu.
Texto: En base a AFP y EFE.
Fotos: AFP.
Diseño: TI El País.