VICTORIA RODRíGUEZ
En 2012, Victoria Rodríguez (1972) hizo televisión junto a Rada. Condujeron Décadas, una propuesta que celebraba el 50° aniversario de Canal 12 con homenajes a diferentes figuras nacionales e internacionales, entre las que recuerda particularmente a Fito Páez. ¿Por qué trabajar con Rada fue “ganar ganar”? ¿Qué le agradece Victoria al Negro? Lo cuenta aquí.
FERNANDO CABRERA
«Entre colegas y amigos siempre hablamos de Rada, es tema frecuente sobre todo por sus frases y anécdotas cómicas. Pero voy a comentar algo que tiene que ver con la composición, contado por Lea Bensassón, su exmánager. Rada tiene una premisa: no corregir ni pulir, siempre utiliza el primer impulso de su creatividad, nunca guarda algo como boceto para mejorar después. Tiene confianza absoluta en su primera inspiración y asegura que cuando piensa más de una variante, la primera siempre es la mejor.»
Fernando Cabrera (1956) es músico, cantante y compositor uruguayo. Grabó junto a Rada en los discos Bailongo (2007), Amoroso pop (2013) y Candombe con una ayudita de mis amigos (2023).
La primera vez que Carolina Cosse (1961) vio a Ruben Rada fue en televisión. Era muy niña, muy pequeña, y de repente se cruzó en la pantalla a un muchacho muy flaco, muy joven, muy negro, muy poderoso en su voz, y no se lo olvidó más. Después, la militancia frenteamplista le hizo conectar a fondo con su obra, redescubrirla; no imaginaba que, 30 años más tarde, él le iba a poner música a su asunción como intendenta de Montevideo. “Una maravilla”, le dice Cosse a El País.
Además de ser un referente de la charanga local y el autor de “Cinco minutos”, uno de los últimos grandes hits de la música tropical uruguaya, Lucas Sugo (1978) ha sido coach de La Voz Uruguay en Canal 10. De su experiencia compartida en el programa con Ruben Rada y de cómo lo mira y admira como artista, este relato.
Nació en Alaska, creció en Argentina y hasta vivió en Montevideo, y de Ruben Rada solo tiene elogios para compartir. Aquí, además de eso, Kevin Johansen (1964), que en su último disco Tu ve grabó con el Negro el tema “El tungue lé”, de Eduardo Mateo, habla de anécdotas irreproducibles y canta un fragmento de “Ayer te vi”.
SAMANTHA NAVARRO
Cantante, compositora y guitarrista
En esta anécdota cuenta un viaje con su padre en el que la música de Rada —que le produjo su emblemático disco Tengo recuperación (2000)— los llevó a compartir una charla muy especial.
LEA BENSASSON
«Voy con un testimonio doble, uno como cantante y otro como gestora. Como cantante, Rada me enseñó muchas cosas importantes que no tienen que ver con la teoría de la música ni con la técnica. Una es: «En la música, para apurar, siempre hay tiempo». Y otra es: «La suavidad siempre gana». Esas dos frases las guardo para mí, como cantante, para siempre, y se las transmito a toda la gente que viene a mi escuela y a todos mis colegas cuando estamos compartiendo música.
Y como gestora, estando al lado de él en muchas ocasiones diversas, desde una prueba de sonido a un hotel, un avión, un programa de televisión, un programa de radio, un piso o un estudio, lo vi llegar y saludar a todo el mundo, saludar al que tira los cables, al operador, a la sonidista, a la productora, a todos en la cadena de valor del trabajo del arte; me lo enseñó y lo repito. Siempre horizontalizar, porque nadie es más importante que otro. Eso lo aprendí de Rada y me parece que la horizontalidad es el nuevo liderazgo: el que entiende eso lidera, y eso se lo debo a él.»
Es cantante, ha trabajado en televisión, tiene su propia escuela de música e incursiona en el humor. Sin embargo, la carrera de Lea Bensasson está atravesada por la figura de Rada: fue su corista por una década y, sobre todo, fue su mánager durante 23 años. A su lado, dice, aprendió mucho.
A Rubén lo conozco primero en el CCK (el Centro Cultural Kirchner de Buenos Aires), en un evento que se hizo con varios artistas, donde nos saludamos y presentamos; fue algo muy sencillo. Pero después nos volvimos a encontrar en Telefe, en La peña de Morfi (en diciembre de 2022), y ahí fue muy lindo porque él fue con Julieta, su hija, entonces ella era la que cantaba, Rubén fue solamente acompañarla. Era una humildad tan grande que tenía, y me acuerdo que todos estaban escuchando a Julieta, él también, pero claro, ¡nadie podía salir de que estaba el Negro ahí! Él decía: “No, por favor, quiero que escuchen a Julieta; por favor, que cante ella, yo estoy acá escuchándola”. Me acuerdo que me dijo: “Yo te admiro hace un montón de tiempo, qué lindo que cantás, tenemos que hacer algo juntos”.
La verdad que tenía una humildad terrible, me sorprendió muchísimo la buena onda y sobre todo el despojarse de lo que es él para dar el lugar a Julieta, y también palabras hermosas hacia mí así. El Negro es un fenómeno.
FACUNDO BALTA